La famosa secuencia en que Leslie Crosbie dispara a su amante fue también la primera escena de la película en rodarse. “Esa escena inicial debía dejar al espectador en estado de shock. Todo debía estar muy tranquilo y silencioso al principio para conseguir el máximo impacto con el disparo”, declararía más adelante Wyler.

Tanta calma, sin embargo, acabó poniendo de los nervios a los ejecutivos de Warner. Y es que la escena, que dura alrededor de dos minutos, tardó un día entero en filmarse, un tiempo excesivo teniendo en cuenta que Wyler debía rodar tres o cuatro páginas de guión al día y que aquel comienzo apenas ocupaba un párrafo. Wyler, es cierto, tenía fama de tomarse su tiempo, pero aquello era demasiado.

“Su fijación por rodar incontables tomas se convirtió en una obsesión en esa escena”, contaba el productor Hal Wallis en su autobiografía Starmarker. “Se podía haber hecho en dos o tres tomas, pero Wyler insistió y finalmente se hicieron 33. Había que recargar una y otra vez la munición de Bette, limpiar la ropa del extra que interpretaba a la víctima y coger a la cacatúa y volver a ponerla en su sitio para que reaccionara al sonido de las balas. Todos estábamos agotados. Sobre todo Bette, que no podía ni sujetar la pistola. Sin embargo, él disfrutaba. La escena le gustaba tanto que simplemente disfrutaba rodándola una y otra vez” .

Cuando la jornada acabó, Wallis se llevó las 33 tomas a casa y, con gran resignación, pasó la noche entera viéndolas y seleccionando una para el montaje. Una vez que la película estuvo finalizada, Wyler y Wallis volvieron a charlar sobre la famosa escena. Al ver que el productor estaba tan satisfecho con el resultado, el director aprovechó para sacar pecho y decirle: “¿Ves? Ahora te das cuenta de lo importante que fue rodarla 33 veces”. “No creas”, respondió Wallis sacando más pecho todavía. “Me quedé con la primera toma”.

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Fuente: Las 33 tomas del inicio de ‘La carta’ « TCM | El cine que ya tenías que haber visto.